SAAV - MEX: 20 000 km

No tengo caja de quinta
y el aire solo de pinta
pero sigo siendo el rey.

La cuKAKAKAKAracha, la cuKAKAKAKAracha, BRUM... se empachó fumando Raid.

A pesar de que la nasta es un tanto picante los deleito con esta música aztecosa y mayistica porque tengo una alegría inmensa (¡No confundir con mensa manito!) Y ¿adivinen por qué paparulos? Porque por fin, después de tanto recorrer, a esta altura unos 20.000 kilometrombos, he llegado al último de los paises de esta barbaridad que me hicieron hacer estos dos desalmados. He tocado con mis propias ruedas la lejana América del Norte. ¡Qué lejos que estamos de Mar del Plata y de su queso! ¡Cuánto recorrido! Cuantas aventuras y apoyo he recibido de ustedes que, a esta altura, son fanáticos asérrimos de este fabuloso semanario de unión latunoamericana.

Agradezco la compañía obtenida en estos últimos meses que fueron los más movidos de mi vida. Les agradezco esos alegres comentarios, llenos de pasión y locura creativa. Los gritos de aliento (hay muchos que no se lavan los dientes, parece que se comieron un perro pekinés con rastas) fueron de suma y vital importancia en los momentos más difíciles provocados por los perejiles rompe rulemanes. Y no los quería nombrar pero como por arte de magia  siempre aparecen estos dos. ¡Ay si serán desagradecidos! Desde que llegaron a Playa del Carmen y se encontraron con los viejos, desaparecieron. Me dejaron tirado a un costado y no me miran ni el aceite. Pero no todas son malas, sino me van a decir que soy un amargo, la novedad es que además de recibir muchos saludos de las visitas (hasta un beso en el capó) ligué unas pastillas de freno y unos cables de bujías asique estoy contento, pero a la vez un tanto preocupado porque todavía no los colocaron y los vi a los dos colifas tratando de cambiar los repuestos por un cajón de cervecitas Corona. ¡Qué desgracia! "paciencia que todo va a salir bien Renato" me dijo Pancho Quilla (un velero que haces viajes a Cozumel) y yo le expliqué que paciencia es lo que me sobra, lo que pasa es que no sé administrarla bien, soy un poco desordenado a veces. De todos modos es menester aclarar que nunca la pierdo sino no estaría acá. Es que creo que no estoy hecho para esperar pero quizás sí soy bastante bueno para aguantar y, en definitiva, eso hizo la diferencia en este viaje.